LAS LECCIONES DE BERNABÉ JURADO (Tercera parte)
8 Despertar en la maca, tras sentir la entrada calurosa de una mañana todavía fresca. Entonces Bernabé no quería voltear a su alrededor, darse cuenta que no estaba en Acapulco, ahí donde tenía que sacar al borrachote del hijo del expresidente Plutarco Elías Calles, quien se negaba a pagar las cuentas y a los hoteleros por sus desmadres; no, ese lugar no era Acapulco, ni tampoco ninguno de esos lugares tropicales que con su automóvil y cuanta mujer le placiera, recorría. Ese lugar de la mañana fresca y tardes calurosas, era las mismisimas Islas Marías. Eso del tedio, es aburrido, más aun, cuando se esta en una prisión tan alejado de las amigas, las viejas, los buenos momentos de la vida. Algún cigarro de mariguana serviría para aliviar las penas y sentir por unos segundos, en cada golpe placentero, que aun existían motivos de vida. Doceava lección, “No te avuevones pendejo, mejor ponte a trabajar” . Levántate todas las mañanas y haz ejercicio, para sentirte vivo y saca