DESPUÉS DEL 68. LA INDEMNIZACÓN ECHEVERRISTA
El expresidente Luis Echeverría Alvarez, (sucesor de Gustavo Díaz Ordaz), busco la reconciliación con la Universidad Nacional. Aunque no realizó ningún acto de ajusticiamiento, ni político ni jurídico con los autores del genocidio del 68, mucho menos, con los del “halconazo” del 71, si al menos, el régimen de Echeverría, fue uno de los principales promotores de la mayor expansión educativa y universitaría que nunca antes de haya registrado. Durante su administración, se creó un nuevo concepto de educación medía superior, como lo fue los Colegios de Ciencias y Humanidades (CCH’s), así como cinco unidades profesionales multidisciplinarias, desconcentradas del Distrito Federal, las denominadas Escuelas Nacionales de Estudios Profesionales (ENEP´s) que se encuentran en Acatlán, Cuautitlán, Iztacala, Zaragoza y Aragón; así como los Institutos de Geofísica, Geología, Geografía, Astronomía, Física, Biología e Investigaciones Biomédicas. La UNAM en el sexenio echeverrista, elevo su presupuesto de 565 millones a 3 mil 580 millones de pesos. (¡Casi seis veces¡).
El Instituto Politécnico Nacional también recibiría un premio ante su actitud ingrata por la revuelta estudiantil del 68. Su “indemnización” consistiría en multiplicar cuatro veces su presupuesto que recibía en 1971, a la cantidad de mil 957 millones de pesos. Además fue en esa administración, que se creó la Escuela Nacional de Homeopatía, las Unidades Xocongo, Culhuacán, Tepepan, Tecamachalco y la Unidad Profesional Interdisciplinaria de Ingeniería y Ciencias Sociales y Administrativas UPICSA, ubicada en Iztacalco. Asimismo le fueron entregados al Politécnico 750 hectáreas de la exhacienda de “El mayorazgo” ubicada en Milpa Alta Distrito Federal, para construir ahí, la Ciudad de la Ciencia y laTecnología, donde existiría el Centro Interdisciplinario de Ciencias de la Salud, de Ciencias Exactas y Tecnológicas, de Ciencias Sociales, “para el beneficio de la educación popular y del desarrollo del país”.