CONFESIONES EN EL PARTIDO HUMANISTA O DE COMO SE FUE PERDIENDO EL REGISTRO. (Tercera parte).
14
Si
alguien estaba preocupado del futuro del Partido Humanista en el Estado de
México, ese era Francisco Nava y obviamente yo.
Comíamos
en una fondita que se encontrara a la vuelta del Instituto Electoral del Estado
de México, de plano Francisco andaba un poco mal económicamente y yo, no tenía
impedimento alguno, de a veces “dispararle” la comida. ¡Total¡, no perdía uno
nada y si ganaba en cambio, la construcción de una sólida amistad. Que mejor
manera de hacerlo, que compartiendo una actividad tan privada y tan individual,
como es comer.
La
comida era muy sencilla, la “fondita” muy forcklorica, aunado a que el servicio
de comedor que proporcionaba el Instituto, era muy malo, alguna vez, escuche a
una Representante de Movimiento Ciudadano, quejarse de dicho servicio, decía,
no me consta si era cierto o no, que en dicha cafetería, se vendía carne
“agusanada” y además muy cara.
Es
mas recuerdo, que el tema del comedor, era el tema de la agenda de los
representantes de Partido quienes conformábamos dicha Comisión; es decir, no
parecía que a nadie le importara los estados financieros del IEEM, ni tampoco,
que adquisiciones contrataba y tampoco les importaba el seguimiento
presupuestal; no, ninguno de esos temas era de vital importancia para los
Representantes de los partidos en el IEEM, sino que el tema de la agenda en
cada sesión de la Comisión, era el pésimo y carísimo servicio que daba el
Comedor.
Pero
mientras en la Comisión de Vigilancia se discutía la posibilidad de cambiar a
un nuevo proveedor de cafetería, (sin concurso, sin licitación, sin proceso
previo de adjudicación); no hacía otra cosa que irme a comer, con el misterioso
compañero Francisco Nava, Representante del Partido ante el Consejo Estatal del
Instituto Nacional Electoral.
Y es que Francisco Nava era cuatísimo, no era el tipo pedante, payaso, sangrón que parecía. Realmente, era un profesionista que sabía valorar su trabajo y como toda persona proveniente de una clase media, producto de la cultura del esfuerzo, era obvio que no podía permitir que se le menospreciara su trabajo, sus conocimientos y habilidades. Creo que su reproche, de que él no fuera el Representante del Instituto Electoral del Estado de México y que se le creyera más a Isidro Coxtinica en todo lo que éste le decía, era lo que más le dolía.
Y es que Francisco Nava era cuatísimo, no era el tipo pedante, payaso, sangrón que parecía. Realmente, era un profesionista que sabía valorar su trabajo y como toda persona proveniente de una clase media, producto de la cultura del esfuerzo, era obvio que no podía permitir que se le menospreciara su trabajo, sus conocimientos y habilidades. Creo que su reproche, de que él no fuera el Representante del Instituto Electoral del Estado de México y que se le creyera más a Isidro Coxtinica en todo lo que éste le decía, era lo que más le dolía.
Cuando
recién nos instalamos al IEEM, Coxtinica siempre hizo alarde de todas las
gestiones que hizo, para que le partido pudiera obtener la acreditación. En su
relato, casi describía que otro poquito más, el Partido Humanista no hubiera
podido participar en las elecciones del 7 de junio y que si lo iba hacer, era
precisamente gracias a su intervención, pues el fue, quien preparo los oficios
y realizó las gestiones ante el Instituto Electoral, para que dicho órgano,
reconociera al Partido Humanista.
También
Isidro Coxtinica hacía ver que los “recursos” que el IEEM otorgaba al Partido,
habían sido gracias a su gestión; casi casí decía también, que era dinero suyo.
Una frase insoportable que él tenía, era cuando realizaba “ajustes” a la nómina
de quienes colaborábamos en el IEEM, Isidro, decía que “nos daba de su dinero”
y obviamente, eso era incómodo. Parecía que Isidro Coxtinica no lograba
diferenciar, los recursos públicos de los privados, o bien confundía, el dinero
público, como si fuera “su” dinero; o pensaba que el dinero que recibía del
IEEM, era exclusivamente suyo.
Pero
lo peor de todo esto ocurrió, fue cuando Isidro Coxtinica, tuvo la ocurrencia,
de pedir la “cuota” del Partido; y es que según el, quienes militábamos en el
Partido, estábamos obligados a pagar la cuota; definitivamente, no me espante,
“colaborar” con las causas, así lo hice en su momento, de manera forzosa y
“orgullosamente”, a favor de Andres Manuel López Obrador, cuando fue Jefe de
Gobierno del Distrito Federal y después, “presidente legitimo”; no me espantaba
pues, dar una aportación del dinero, para la causa; pero si me preocupaba, la
manera en que lo pedía Coxtinica.
Lo
había hecho de la manera corriente y vulgar.
Lo
pidió por escrito, inclusive, hasta hizo sus propios recibos de pago e hizo la
“coperacha”, alegando que era instrucción del Profesor Celis. Francisco Nava, definitivamente, dijo que no
iba pagar “¡ni madres¡” y Alma Becerril, de forma resignada, agacho la cabeza,
aceptando ese tributo; yo por mi parte, le hice ver a Coxtinica el grave error
que estaba cometiendo. (Obviamente, tampoco iba pagar, ni un solo quinto).
Le
dije que no pidiera “moches” eso por escrito, porque quedaba mal él y hacía
quedar mal, al Profe Celis. Claro que es una obligación pagar cuotas para quienes
eramos militantes del Partido, pero esa obligación, se encuentra perfectamente
limitado y regulado en la ley. “¡Ubicate Coxtinica, tu eres el
Representante, no eres el Comisionado o el Secretario de Finanzas del Partido,
no eres la autoridad competente para requerir y cobrar cuotas, eres solamente
el Representante y destruye por favor esa documentación que has generado,
pidiendo se te pague, porque lo único que haces, es “empinarte” tu sólito¡.”
Creo
que eso le molestó a Isidro Coxtinica; Francisco Nava en cambio fue mucho mas
directo, “¡No seas pendejo pinche
gordo¡”. “¡Cómo será imbécil¡”; Cuando
el Profe se entero de que Coxtinica pedía dinero a su nombre, lo regaño y
ordenó, que nadie, absolutamente nadie del Partido, erogara algún gasto y en caso de haberse entregado algún dinero, este debía devolverse. Me
parece también, no me consta, que Celis regaño a su Representante y le pidió,
que por favor, “no lo metiera en chismes, ni en problemas”.
Algo
positivo de Isidro, por aquellos días, luego del oso de “pedir dinero” a favor
del Partido, considero que debía de asesorarse de las finanzas del Partido y
fue así, que se le ocurrió a citar a la estructura del Partido, a que todos
recibiéramos un curso, de financiamiento del Partido.
La
idea fue aceptada por todos. Con esto, Isidro Coxtinica, no tuvo de otra que
aceptar su error. ¡Hizo, otra más de sus pendejadas¡
No
había tenido oportunidad de conocer Toluca, sino hasta el día en que Juan
Carlos Campos, me hizó un recorrido por las calles de la capital mexiquense,
con el objeto, de buscar, el domicilio del Tribunal Electoral.
Fue
ese día que conoci el “Zocalo” de Toluca. Su Palacio de Gobierno y su Catedral.
Coxtinica
me dijo con toda certeza y seguridad, de que el Tribunal, estaba “al lado” de
la casa donde se instalaría las oficinas del Partido y resulta que si era
cierto, pero estaba en lo incorrecto, pues el Tribunal que confundía Isidro,
era el “Federal” y no el “local”, pues este ultimo, se encontraba, “pasando el
parque”.
Esto
significaba que Isidro, no diferenciaba, lo local, de lo federal. ¡Eso, si era un
error colosal¡. Que no podía permitírsele a quien se decía, Representante.
Trataba
de corregir a Isidro Coxtinica para que no cometiera ese tipo de errores, pero
automáticamente Isidro se cerraba y empezaba hablar de cosas, que no tenía nada
que ver con el proceso electoral.
Isidro
decía las cosas con tanta seguridad, que parecía cierto, podía convencer a
otros, menos a mí. La mera verdad, después de la tercera vez que platicaba con
él y luego de escuchar a Francisco Nava, me di cuenta que Isidro “volaba”
mucho, era muy dado a tener ideas ocurrentes, por ejemplo decía, que había que
escribir la Plataforma Electoral y que para ello, iba a tener reuniones con
gerentes de la Ford, para proponer un negocio que ayudaría a la clase media a
comprar adaptaciones a sus vehículos y pudieran circular sin contaminar. Eso
que decía Isidro, dicho en las palabras de Francisco, era una verdadera
“chaqueta mental”.
Un
día de plano, trate de despertar señales de alarma, a Isidro y le dije, en
pocas palabras, que ya dejara de jugar, que ya era momento de trabajar para el
proceso electoral que se avecinaba; sin embargo Isidro, concebía mal el trabajo
y ese el principal problema de comunicación que teníamos, pues no lograba este
diferenciar, cual era “su plan”, sus actividades y metas por realizar; Isidro,
sólo orquestaba un “plan territorial” en secreto, que solamente él entendía y
él, conocía. De plano, tuve que decirle que yo no veía absolutamente nada
serio, pues a diferencia de Francisco Nava, él ya sabía, cuantos representantes
tenía que tener el partido y que acción tenía que realizarse, para asegurar el
mínimo del 3% de los votos. Inclusive Francisco hizo el estudio de votación
mínima por cada uno de los 125 municipios que conforman al Estado, para
asegurar regidurías. Su estudio, o no
fue concluido, o nunca lo término, o nunca se divulgo; peor aun, nunca se llevó
a cabo.
Pero
Isidro Coxtinica reacciono molesto a mi comentario. “El compañerito Nava, no
sabe, porque nunca ha operado en campo y desconoce muchas cosas, que desde
el escritorio, no alcanza uno a
diferenciar”. Coxtinica, en forma irónica no hacía mas que reírse de las
propuestas de Francisco Nava, pues consideraba que este, sólo formulaba “planes
de escritorio”, del “3 por 3”, o del “5 por 5” y ese tipo de “estrategias, que
no servían para nada, pues lo importante para él, era operar en territorio y
para ello, se tenía que salir al campo, a visitar y detectar los liderazgos, a
los candidatos y trabajar, absolutamente de tiempo completo.
Pero
además, Isidro Coxtinica me decía: “El compañero Nava, se confunde, ¡Yo soy su
Jefe¡”. Varias veces, le replique a Coxtinica, diciendo que eso no era cierto,
que la nómina del IEEM, no era de su propiedad, ni era absolutamente para él;
sino que era una canonjía que el Instituto daba, para los partidos, no para los
Representantes de los Partidos Políticos. Isidro pues, sólo se reía.
Estaba
pues, ante la presencia de dos tipos de Representantes. Francisco Nava el
intelectual, con amplía experiencia en el escritorio, en los asuntos técnicos y
jurídicos; Isidro Coxtinica, con la experiencia en el campo, en los asuntos
políticos y logísticos que arroja, una campaña electoral.
Obvio
que Coxtinica, si bien, decía ser conocedor de su materia, me preocupaba “su
método”, concretamente su organización, pues el mismo se había establecido
horarios “negreros”, que incluían sábados y domingos, desde tempranito hasta el
anochecer, horarios, que por cierto, sólo los cumplía su sobrina Berenice y
Juan Carlos, porque la verdad, es que Isidro, nunca estaba en la oficina y
cuando llegaba a la misma, lo hacía para dormirse.
Le
dije a Isidro que no hiciera eso, que no cansara a su sobrina y a Juan Carlos,
con “horas nalgas”, con trabajo aburrido e improductivo; Isidro Coxtinica argumentaba
que yo no conocía el proceso electoral y que llegaría el momento, en que tenía
que quedarme a radicar en Toluca; y claro, estaba totalmente de acuerdo con lo
que me decía, pero insistía, que eso ocurriría en forma gradual y a partir del
mes de marzo o de abril, no en noviembre y mucho menos en fiestas decembrinas.
Casi casi le decía a Coxtinica: “¡No mames¡”.
-
Algo tenemos que hacer. – le decía a
Francisco Nava – estaba preocupado, porque no veía nada en serio.
Ese
pendejo, ni siquiera se ha puesto a leer todo lo relacionado con la “casilla
única”. No sabe cuantas casillas se van
instalar en el Estado de México, ni quien va ser la instancia que va operar y
regular este proceso. Vamos a capacitar,
eso es lo único que podemos hacer; dedicarnos a la capacitación de quienes
serán nuestros representantes y para ello, hay que elaborar un Manual y unas
presentaciones en power point, para los cursos que vayamos a dar. ¡Es lo único
que podemos hacer por el Partido¡.
Francisco
Nava lo adopte entonces, como “mi líder”, “mi guía política”, por no decir, “mi
guía espiritual”; él, era la única
persona inteligente que si entendía el problema y no me hablaba, de proyectos
chaquetos y secretos. Lo seguiría, hasta donde lo tendría que seguir.
Pero
la persona, quien debía de tomar la decisión de la remoción de Coxtincia, era
el Profesor Celis; ¿Por qué chingados no lo hace?. Alma Becerril de plano, le
decía hasta el cansancio, toda la desconfianza que le despertaba Isidro y el
profe, no hacía, mas que decirle Alma, que “era una floja”, “que lo había
decepcionado”; Francisco por su parte,
hacía lo mismo, pero Celis, de plano respondió tajantemente. “¡No insistan¡”. “¡No
voy a cambiar a Coxtinica¡”. “Coxtinica se queda en el IEEM”.
Para
Celis, la remoción de Coxtinica, no procedía, porque aun no era el momento de
hacerlo, había que “darle tiempo”, Celis, llegó a decir, que Coxtinica, “era un
chingón” y que nadie del Partido, absolutamente nadie del Partido, iba poder
seguir su propio ritmo. ¡De veras, yo no sé que maravillas le dijeron al Profe
de Isidro Coxtinica, pero lo que veía Alma, Francisco y yo, parecía que nadie,
absolutamente nadie lo veía.
Pendejadas
y mas pendejadas.
Como
aquella que ocurrió a finales del mes de noviembre. Cuando no se llevaron a
cabo los registros de los Representantes del Partido, ante Consejos distritales
y municipales.
¡Que
pendejos¡. En balde, el profe anda visitando el Estado de día a noche, de
domingo a domingo, instalando a diestra y siniestra, las Juntas Municipales de
Gobierno y Coxtinica, su “Representante estrella”, no había realizado las gestiones
para la acreditación de los Representantes.
¿Entonces
que chingados hace el pinche gordo?. En balde tantas horas nalgas y no se había
tomado isidro la molestía de redactar un oficio para acreditar a los
Representantes.
Afortunadamente,
el único representante que hacía ese tipo de errores, era isidro Coxtinica.
Francisco Nava por su parte, desempeñaba sus funciones, sin los “apoyos”, que
Isidro recibía, sin errores y sin disculpas.
Y mientras tanto el Profe Celis, acompañado siempre de sus damas de compañia, Minerva, Josefina, Luz y Alma, recorriendo con ellas, rancheria por rancheria el Estado de México, de punta a punta, de barrio en barrio, de municipio en municipio, siempre en la búsqueda de quienes serían sus candidatos y candidatas, a las diputaciones, regidurias y presidencias municipales. Era sin duda alguna, un coordinador que viajaba mucho y que al parecer, dentro de su pasión política, tenía un grave punto débil, ...¡ellas¡.
Y mientras tanto el Profe Celis, acompañado siempre de sus damas de compañia, Minerva, Josefina, Luz y Alma, recorriendo con ellas, rancheria por rancheria el Estado de México, de punta a punta, de barrio en barrio, de municipio en municipio, siempre en la búsqueda de quienes serían sus candidatos y candidatas, a las diputaciones, regidurias y presidencias municipales. Era sin duda alguna, un coordinador que viajaba mucho y que al parecer, dentro de su pasión política, tenía un grave punto débil, ...¡ellas¡.
El
tema de los dineros, es un tema delicado. Lo primera hipótesis que tuve cuando
ingrese al Partido Humanista, era saber: ¿donde estaba el dinero?. Desde “adentro”,
sería fiel testigo, de los usos indebidos que harían de ese dinero público;
sabría, su forma de administrarlo y sería también testigo, del derroche del
mismo.
Mucho
se dice de la corrupción y el despilfarro de recursos públicos. Lo cierto es,
que en esta época, el internet ayuda a informar y derribar muchos mitos. Uno de
ellos, el importe de lo dineros. Este siempre fue público, bastaba acceder a
google y buscar notas periodísticas sobre el financiamiento publico de los
partidos políticos, o bien, ingresar directamente a la página del INE y buscar
el Acuerdo de financiamiento.
Para
el año 2014, el Instituto Nacional Electoral autorizó se le entregara al
Partido Humanista, la cantidad de 31.7 millones de pesos. El PRI por su parte recibiría 415.2 millones,
el PAN 348.7 millones y el PRD 265.8 millones de pesos.
Para
el año 2015, el Instituto Nacional Electoral autorizó para el Partido Humanista
78.1 millones de pesos; el PRI recibiría 1,022.4 millones, el PAN 858.7
millones y el PRD 654.6 millones.
Si
comparamos el Humanista con lo que recibió el PRI, es obvio deducir, que el
financiamiento de este, fue catorce veces inferior de lo que percibió el PRI.
Pero
además, ese dinero, era el que otorgaba el Instituto Nacional Electoral, aparte
cada entidad federativa, recibiría su propia “bolsa” de dinero; el Partido
Humanista en el Estado de México, también lo recibiría, pero no del INE, sino
del Instituto Electoral del Estado de México IEEM.
Así
pues, durante el 2014, el IEEM entregó al Partido Humanista del Estado de México durante el año
2014, la cantidad de 1 millón 588 mil pesos para sus actividades ordinarias y
31 mil pesos, para sus actividades especificas.
Para
el año 2015, el Partido Humanista del Estado de México, recibiría 9 millones
713 mil pesos para sus actividades ordinarias y 2 millones 914 mil pesos, para
gastos de campaña. En total, 12 millones, 627 mil pesos.
No
me quedaba de otra, que hacer algunas reflexiones sobre el financiamiento
público.
La
primera de ellas, es que el Partido Humanista, al menos en el Estado de México,
recibió catorce veces menos, de lo que recibió el PRI.
La
segunda reflexión, es que el financiamiento público fue en dos rubros. El
financiamiento que recibió el Partido Humanista nacional, que fue tan sólo en
el año 2015 de 78.1 millones de pesos, para toda la República mexicana; y el
que recibió el Partido Humanista en el Estado de México, de 12.6 millones de
pesos.
Hasta
donde sé, el Partido Humanista nacional, no consideró prioritario otorgar
recursos extras al Estado de México, pues consideraba que estaba, “bien
pagado”. No obstante de que el Estado de México, representaba al menos, el 10%
de los electores a nivel nacional; lo justo hubiera sido, que el Nacional
hiciera entrega al Estado de México, de por lo menos 7 millones de pesos más.
Sin embargo, Araceli, la Comisionada de Finanzas del Partido nacional, pedía
que fuera el Estado de México, quien le entregara la cantidad de cien mil pesos
mensuales, al nacional. Es decir, que
las cosas fueran arreves.
Afortunadamente
Ignacio Irys Salomón, no dio jamás alguna instrucción en ese sentido; es más,
pidió que al Estado de México, no se le pidiera dinero, pues estaba conciente
que operar en el Estado, requería mayores recursos y no, quitárselos, como
proponía Araceli; así pues, se dejo que
el Estado de México, administrara sus propios recursos y si bien, el nacional,
no hizo una entrega considerable de los recursos adicionales que necesitaba el partido, si lo hizo, abonando la cantidad
de 60 mil pesos mensuales y eso fue, sólo por unos tres meses; cierto también
es, que Ignacio Irys no le quito dinero al Estado. ¡Ni un solo peso¡. Pero
lamentablemente, esa cantidad irrisoria no era sufiente. No le hubiera caído nada
mal, que por lo menos, el nacional le hubiera dado al Estado de México, un
millón de pesos más. Lo justificaba. El Estado era la entidad que tenía 40 de los 300 distritos locales federales y al menos, el 12% de electores de todo el listado nominal, se concentraba en el Estado de México. Pero eso, nunca se entendió.
¿Quién
administraría los recursos públicos del Partido Humanista Estado de
México?. Era obvio que ese fue el primer
tema que trató el Coordinador Ejecutivo Javier López Celis con Abimael Vilchis
el Vicecoordinador.
Abimael
Vilchis, era por así decirlo, “el numero dos” del Partido Humanista en el
Estado de México. Tenía fama de ser un ranchero adinerado, alegre con ciertos destellos de rico despota y prepotente; fue un distinguido militante bajo las siglas del PAN. Había sido ya candidato a diputado y candidato
a presidente municipal, en Villa Victoria, su municipio tan querido por él. Abimael; era además, presidente de UNIMOSS en el Estado de México y por ende, tenía una
cercanía con el líder nacional del Partido, Javier López Macías, Coordinador
Ejecutivo del Partido Humanista a nivel nacional; a quien ya para ese entonces,
lo apodaban “Chabelo”.
Javier
López Celis, en cambio, había sido un “prototipo”
de luchador social. Se dedicó estudiar Pedagogía en la ENEP Aragón y después, se dedicó, influenciado por las
ideas de Paulo Freyre, a construir “secundarias populares”, de ahí que obtuvo
su “titulo profesional”, de “Profe”. Esto
significaba, que Javier López Celis, en sus años de “profesor”, operaba de la
siguiente forma: invadía terrenos de dueños desconocidos, dentro de los
municipios de Nezahualcoyotl, Ecatepec, Chimalhuacán, para poder luego ofrecer
servicios educativos a dichas poblaciones que carecían de escuelas.La construcción de "escuelas populares" en dichas zonas, desencadenaba, todo un activismo de la comunidad por mejorar los servicios públicos: agua, drenaje, pavimentación, alumbrado público, transporte; de ahí que su formación política, tenía raices, en la llamada "pedagogia del oprimido"; la escuela, como un factor que promovía la revolución.
Fue así como se inició en la lucha. Celis me platicaba inclusive, que la manera que el Gobierno del Estado de México hizó para frenar la participación popular, lo hizo de la misma forma, de esos movimientos sociales populares; el gobierno de Salinas y su exgobernador Emilio Chuayfett fue creando y fortaleciendo con mayores recursos y patentes de impunidad, al denominado Movimiento Antorcha Campesina.
Fue así como se inició en la lucha. Celis me platicaba inclusive, que la manera que el Gobierno del Estado de México hizó para frenar la participación popular, lo hizo de la misma forma, de esos movimientos sociales populares; el gobierno de Salinas y su exgobernador Emilio Chuayfett fue creando y fortaleciendo con mayores recursos y patentes de impunidad, al denominado Movimiento Antorcha Campesina.
El
profe pues, inició su carrera política en el PRD, luego de haber tenido una
experiencia previa estudiantil con la huelga universitaria del CEU del año de
1987; anécdotas y más anécdotas me platicaba el Profe, entre ellas, haber sido
parte del cuadro político que logro en 1996, la derrota electoral del PRI en
Nezahualcoyotl, que antecediera, el triunfo aplastante del PRD en el Distrito
Federal en el año de 1997.
El
caso, es que ambos lideres eran totalmente opuestos. Vilchis burgues ranchero y
Celis, el clase mediero urbano popular. Uno del ex PAN y el otro, del ex PRD.
Uno de “derecha” y el otro, de “izquierda”, uno de UNIMOSS y el otro, de
SINERGIA.
El
Partido Humanista en el Estado de México, se partió en dos; la Coordinación
ejecutiva y por ende, la representación política del mismo, quedo en manos de
Javier López Celis; pero el manejo de los dineros, se quedó en Abimael Vilchis,
el “señor del dinero”. No faltaron las
personas dentro de SINERGIA, que acusaron a Celis, de haberse “vendido” a
UNIMOSS. Lo cierto es, que nunca observe en ninguno de los dos principales lideres del partido, la mínima señal de ambición por el que es obvio que el manejo del dinero ajeno y mas, del dinero público, siempre despertara suspicacias y sospechas de corrupción; el Partido Humanista y sus dirigentes, no eran excento de ello.
El
Comisionado de Finanzas del Partido, fue Edgar; el joven contador, exempleado
del difunto padre de Abimael Vilchis, ahora convertido, en el tesorero del Partido
Humanista del Estado de México. Ningún movimiento nominal podía hacerse, sin la
firma de Edgar; y era obvio, que la lealtad de Edgar, fue hacia al hijo de su
expatrón, Abimael Vilchis, no hasta en ese momento, el desconocido profesor Javier Celis. Es obvio también, que jurídicamente, el responsable de las finanzas del Partido, recaían en Edgar y dentro de la inseguridad que mostraba el joven comisionado, era evidente, que estaba consciente, que cualquier manejo indebido del dinero, recaería en él.
Correspondería
a Edgar administrar esos recursos y el día que lo conocí; obvio que me espante.
Lo note inseguro, temeroso, sin
capacidad, ni habilidad alguna. No tenía cara de contador, era simplemente, un ranchero más. ¡Válgame¡. ¡Que riesgo corre el partido¡. Considere que Isidro Coxtinica, tenía una mejor
propuesta; era ni más ni menos, que Juan Carlos Campos. Pero el que mandaba sobre los dineros, no era Coxtinica, ni Celis, era ni más ni menos, que Abimael.
17
Si
otra persona, además de Francisco Nava, valía la pena en el Partido, ese era,
Juan Carlos Campos Campos. Me parece que su talento, jamás fue aprovechado y
sus conocimientos y habilidades en materia de contabilidad e informática, lo
hubieran convertido naturalmente, en el mejor técnico del área contable.
Juan
Carlos, era un Contador Público, egresado del Instituto Tecnológico de
Tianguistenco; para él, la política, no le interesaba, ni le llamaba la
atención, poco sabía del tema; un día, me pregunto los significados de algunas
expresiones que escuchaba, pero que no entendía, ni sabía; por ejemplo, un día
me preguntó que era ser de “izquierda”, o que significaba, ser de “derecha”,
que era ser “conservador” o “liberal”, o que eran los “derechos humanos”. El mundo de Juan Carlos, nunca fue la
política, sino el futbol y las finanzas, una excelente habilidad matemática y
del manejo de las bases de datos, que en verdad, me daba coraje y tristeza,
cuando Isidro Coxtinica, lo utilizaba como Chofer, más aun, a la hora de la
comida, que tenía que recoger a Gabriela de la escuela de computación. Todo un
profesionista, tratado como vil chofer, al servicio, dicho con todo respeto, de
una analfabeta digital.
Juan
Carlos, me decía que el contador Edgar, “estaba mal”. Que cuando lo escuchaba
hablar, decía varios errores; por ejemplo, desconocía el lenguaje técnico, el
manejo de los impuestos y otras cuestiones contables, Juan Carlos decía que no
alcanzaba dinero para pagarle seguro social a los trabajadores y que podía
hacerlo, bajo otro esquema fiscal. Edgar, inclusive el profesor Celis, estaban
interesados que quienes fueran empleados del Partido tuvieran Seguro Social,
pero al parecer, los recursos del Partido fueron insuficientes. Inclusive,
Minerva, miembro de la Junta de Gobierno Estatal, ofreció Pólizas de Seguros,
para los militantes, pero tampoco, se lograron contratar.
Los
empleados del Partido, carecieron de seguridad social.
Cuando
fue, el primer curso de finanzas, el Instructor dio un panorama gris. Las
obligaciones legales eran tantas, que el Partido podía ser multado, de no
cumplir con dichas obligaciones. Parecía que la responsabilidad de Edgar era
tanta, que al menos en lo personal, predecía que las próximas broncas que
tendría el Partido, no solamente provendrían de la representación, sino también
del área contable. Es más, llegue a Pensar, que la “bomba” la tendría Edgar, no
Isidro.
Quizás,
preocupado por eso, le pedí a Juan Carlos, elaborada un Proyecto de Presupuesto
de Egresos, llamado técnicamente “Catalogo de Cuentas” o “Clasificador Objeto”;
tenía pues, que administrarse la prerrogativa de casi 500 mil pesos que el
Partido recibiría cada mes. Pero Juan Carlos, se lamentaba que fuera el chofer
de Isidro y que lo obligara a montar guardias absurdas hasta las doce o una de
la mañana, o que inclusive, le obligara trabajar los domingos.
Aquel
curso, se nos dijo que sería la Unidad Técnica de Fiscalización del Instituto
Nacional Electoral, quien se dedicaría a fiscalizar los recursos, de las
prerrogativas ordinarias, especificas y de campaña; que debían elaborarse
informes trimestrales, anuales y de campaña; y que la información contable, se
introduciría en un software; en pocas palabras, la contabilidad sería en
“línea” y en “tiempo real”.
Pero
el tema más escabrosos de todos, fue cuando se abordó el financiamiento de las
campañas y el concepto de “donación”. Se dijo, que los candidatos debían
reportar todo, casas de campaña, teléfonos, automóviles con megáfonos, salones,
carteles, lonas, gorras, playeras y hasta los tamales que se regalaban;
inclusive, hubo una pregunta, por cierto generada por Coxtinica que causo
revuelo; preguntó que si se contrataba a un grupo de banda como “La
Arrolladora” y esta decidiera “donar” un concierto a favor de un candidato, ¿que ocurriría?. Pues resultaba, que de cumplirse ese supuesto, no podría darse tal donación y
que dicho concierto, debía de cuantificarse su valor en pesos y sumarse, en los
gastos efectuados, con las únicas limitantes de no rebasar los “topes de
campaña”. Debían pues los candidatos, cuidar sus gastos, pues de rebasar dichos
“topes”, en “más de un 5%”, corrían el riesgo, de que la elección se anulara.
Nadie
de los ahí presentes entendió ese dato. Sus preguntas parecían mas
inconformidades por tal donación, que preguntas propiamente técnicas. Pues a
todos los presentes, les pareció injusto, que se tenía que cuantificar valores
unitarios de las playeras, gorritas, lonas, pulseras, calcomanías, las aguas o
los tamales, las naranjas o cualquier otro bien consumible, que se aportara en
la campaña. Como si el partido, o los
candidatos, tuvieran mucho dinero.
Sin embargo, en estos temas del financiamiento, ganas mas la ignorancia, la sospecha, el insulto político de decir "ratero", que la verdad, que el aspecto técnico y legal; inclusive, de la voluntad jurídica de promover la búsqueda de esa verdad y de su consecuente responsabilidad.
Sin embargo, en estos temas del financiamiento, ganas mas la ignorancia, la sospecha, el insulto político de decir "ratero", que la verdad, que el aspecto técnico y legal; inclusive, de la voluntad jurídica de promover la búsqueda de esa verdad y de su consecuente responsabilidad.
Era
desde luego un tema complicado, había que estudiar esa rama especializada del
derecho electoral, que es financiero; conocer, los derechos, obligaciones y
prohibiciones, de los partidos, en el manejo de los recursos públicos. En verdad, que no observe en ninguno de los
ahí presentes, interés o habilidad en el manejo del tema. Ericka, la Secretaría
de Asuntos Jurídicos, ni se aparecía, y el buen compañero Edgar, sólo
permanecía callado, escuchando y solamente escuchando.
Lo
importante de aquel curso, es que, la “estructura” coincidió por vez primera;
ahí estaba, la Profesora Rosa, el líder Conrado, Tomo Almazán, José Luis,
Minerva, Diego y otros más.
Los
tiempos de la campaña, poco a poco, se aproximaban, mientras que el equipo,
poco a poco se integraba.
El Partido Humanista en el Estado de México, aun no tenía oficina en donde instalarse, aunque bien, Raymundo y la profesora Rosa, habían logrado conseguir una casa, amplia con seis recamaras, sala, comedor, cinco baños, estacionamiento para unos ocho carros; todo esto con una módica renta de 18 mil pesos; una oficina, que aun no estaba equipada de escritorios, computadoras, ni de personal, pero que sería la sede oficial, del Partido Humanista en el Estado de México.
Entonces el Profe, no dudo a convocar a todos los integrantes de la Junta Estatal de Gobierno.
El Partido Humanista en el Estado de México, aun no tenía oficina en donde instalarse, aunque bien, Raymundo y la profesora Rosa, habían logrado conseguir una casa, amplia con seis recamaras, sala, comedor, cinco baños, estacionamiento para unos ocho carros; todo esto con una módica renta de 18 mil pesos; una oficina, que aun no estaba equipada de escritorios, computadoras, ni de personal, pero que sería la sede oficial, del Partido Humanista en el Estado de México.
Entonces el Profe, no dudo a convocar a todos los integrantes de la Junta Estatal de Gobierno.
En lo que llegaba la primera sesión ordinaria de la Junta Estatal de Gobierno del Partido Humanista en el Estado de México, Francisco
y yo, hablábamos de temas interesantes, tengo que reconocerle, que con él,
aprendí a utilizar, el “lenguaje incluyente” o el llamado ”lenguaje de derechos
humanos”. – “No se dice “puto”, “maricón”, “joto”; se dice persona del grupo de
población LGBTTT”. “No se dice “viejito”, “abuelo”, “ruco”, se dice, persona
“adulto mayor”; “No se dice “enano”, “chaparro”, se dice, persona de talla
baja”. Así pues, Francisco Nava, nos corregía el modo de hablar y predicaba, el
amor y el respeto a los derechos humanos. Discurso por cierto contradictorio en su persona, su adversión a Coxtinica, lo hacía ver, como una persona demasiada envidiosa e intolerante.
.
Un
día Berenice me contó una anécdota que vivió con Alma, me dijo que en el IEEM,
recibió la dotación mensual de papelería y que se disponía a recogerla,
cargando cajas y paquetes, bajando y subiendo escaleras, mientras que
Francisco, sólo las observaba como cargaban, jamás tuvo éste el gesto
caballeroso, de ayudarlas a cargar. “¡Era un patán¡”. “¡Hablaba de derechos
humanos, pero no los ejercía, no los cumplía, era falso, por no decir, hipócrita¡”.
No
creo que fuera eso, simplemente, Francisco quizás era intolerante con las
personas que consideraba, tenían un perfil educativo inferior. Por ejemplo,
cuando fueron las comisiones de participación ciudadana y cultura democrática,
en la que participaba Berenice, Francisco nunca la dejo intervenir en la
Comisión, no la dejaba hablar, quería evitar, que “la escuincla, dijera
pendejadas”; no se diga Isidro Coxtinicia, que avergonzaba al partido, cuando
acudía a las comisiones a dormirse.
Tengo
fotografias de ese gordo cuando se duerme en las sesiones, llega tarde además,
nunca esta, no nos posiciona, no dice nada en las sesiones; no es posible que
Celis, no haga nada.
- Celis va tomar la decisión de removerlo,
tarde o temprano lo va hacer – decía Minerva, quien lo conocía más – lo que
pasa, es que no quiere “quemar” al Partido. El sabrá en que momento.
Sin
embargo, Francisco Nava, usaba también el mismo argumento: “¡Tenemos que cuidar la
imagen¡”. No podemos desaprovechar el foro del IEEM, con representantes
pendejos, que solo vienen a dormirse o a decir pendejadas, o que hablan, sin el
debido uso del lenguaje de los derechos humanos.
Cierto.
El Partido Humanista, tenía marca de “humanista” y por lo tanto, debía ser, el
Partido de los Derechos Humanos. El problema, es que quienes estábamos
involucrados en el proyecto, poco o nada de derechos humanos sabíamos.
Isidro,
cuando hablaba no se le entendía nada; Francisco, aunque fuera el “patán” que
decían que era, si se le entendía cuando hablaba y yo por mi parte, sólo
observaba, callaba y escribía.
El
profe, nunca va quitar a Celis de la representación – le decía a Francisco – ambos
son iguales.
Francisco,
se quedo callado.
19
Francisco tenía la tesis de que el Partido Humanista había logrado obtener su registro, porque había sido el último partido político en registrase y fue por eso, que de “puro churro”, logró obtener registro. Al pedirle me explicara esa hipótesis, me dijo palabras más y palabras menos lo siguiente:
Que existía una “industria” de ciudadanos acarreados que vendían su voto y su asistencia a las asambleas, para aquellas asociaciones civiles que buscaban constituirse como partidos políticos y pudieran cumplir los rigurosos requisitos que exigía la ley, para conformar nuevos partidos políticos; resulta pues, que una vez que el INE revisa los padrones de asistencia, el último registro borraba lo anteriores, de tal forma, que por eso, el Partido Humanista logró su registro, porque fue el último partido en registrarse.
Que existía una “industria” de ciudadanos acarreados que vendían su voto y su asistencia a las asambleas, para aquellas asociaciones civiles que buscaban constituirse como partidos políticos y pudieran cumplir los rigurosos requisitos que exigía la ley, para conformar nuevos partidos políticos; resulta pues, que una vez que el INE revisa los padrones de asistencia, el último registro borraba lo anteriores, de tal forma, que por eso, el Partido Humanista logró su registro, porque fue el último partido en registrarse.
¡Vaya¡,
¡vaya¡. Uno pensando en que los ciudadanos acuden libremente a las asambleas
para conformar nuevos partidos políticos y Francisco, diciéndome que no era así,
que existía toda una industria del voto y el asambleísmo “comprado”, al mejor
postor de quien quisiera hacer partidos políticos. Era obvio. Así se formó el
Partido Nueva Alianza.
EL
PRI y el PAN, les tocó ser partidos privilegiados; sobre todo el PRI que hizo
la legislación electoral en 1946, reconociendo en su entonces mayoría legislativa
en los congresos, a los partidos políticos que ya existían, entre ellos el PAN.
De tal forma, que el gobierno hizo al PRI y un pequeño contrato de asociación
civil, hizo al PAN. Ninguno de estos dos partidos, ha vivido la experiencia de
conformar un partido político, como en su momento, lo hizo el Humanista. Simplemente su derecho de historia, así lo hizo.
El
PRD se hizo partido, gracias a que el Partido Mexicano Socialista, le cedió su
registro. Es decir, el PRD nunca vivió un proceso constituyente, sino que “recibió”,
la franquicia del PMS, para poder ser el partido que ahora es.
El
Partido del Trabajo PT y el Partido Verde Ecologista Mexicano PVEM, nacieron, gracias
a las bondades de la ley electoral de 1990, que al igual que la ley electoral de
1977, otorgó facilidades a las asociaciones civiles, para conformar “nuevos
partidos políticos”. Estos partidos, inclusive perdieron su registro en 1991 y
lo volvieron obtener, meses después, para volver a participar en las siguientes
elecciones.
El
Partido Movimiento Ciudadano, llamado antes, “Convergencia Democrática”, se
creó gracias al emporio económico del exgobernador de Veracruz Dante Delgado;
político que inclusive fue encarcelado durante el régimen de Ernesto Zedillo,
acusado de actos de corrupción, pero que salió de la cárcel, inocente, al igual
que su contemporáneo Raúl Salinas de Gortari y otros ilustres reos, “injustamente”
acusados.
El
PT, MC y PVEM, han sido partidos políticos que han logrado sobrevivir, gracias también,
a las bondades de la ley electoral. Nunca tuvieron prohibiciones para aliarse en
coalición con partidos “grandes”. Tan sólo el PT y MC, se sumaron al PRD en las
campañas electorales de 2000, 2006 y 2012; mientras que el PVEM, también lo
hizo, en el año 2000 apoyando al PAN y en el 2006 y 2012, apoyando al PRI. Quizás
por esa razón, esos partidos, al día de la fecha sigan sobreviviendo.
Nueva
Alianza, fue un partido, que se conformó, gracias a las estructuras
corporativas del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, concretamente,
de su ex lideresa Elba Esther Gordillo.
El caso de MORENA, se conformó también, bajo la escisión del PRD, el liderazgo de su dos veces excandidato presidencial Andrés Manuel López Obrador y también, así hay que decirlo, gracias al apoyo de los recursos públicos, de aquellos municipios y/o entidades federativas, gobernadas por el PRD, que se salieron de este partido, para conformar MORENA.
Encuentro
Social, se dice, que se constituyó gracias al apoyo de las iglesias cristianas
evangélicas.
¿Y el Humanista, como carajos se formo?. Ignacio Pinacho me respondió que el Partido se formó, de la alianza de varios liderazgos sociales que no se sentían representados, en ninguno de los partidos políticos tradicionales. Sin emabrgo, era notorio que había sido la alianza de dos organizaciones sociales, dedicadas al agro, UNIMOSS encabezada por Eduardo Javier López Macías y CODUC, cuyo líder era Ignacio Irys Salomón. El tercer grupo fue MRD, de Ricardo Espinoza.
En
conclusión, Si no existe una organización fuerte económicamente, con respaldo
social, de Baja California a Yucatán, que no sea, un sindicato nacional, una
iglesia religiosa, inclusive otro partido político, difícilmente, cualquier
organización de ciudadanos pueda cumplir los requisitos absurdos establecidos
en la ley.
Y es
que para motivo de vergüenza, la forma que nuestro derecho regula en la
conformación de nuevos partidos políticos, es demasiado compleja. Hay que hacer
por lo menos, 200 de 300 asambleas distritales, con una asistencia de por lo
menos 300 personas en cada asamblea y la suma de todas las asambleas, no debe
ser inferior al 0.26% de las personas inscritas en el Padrón Electoral. Esto equivale a por lo menos tener más de 220
mil afiliados.
A
cambio de eso, el Partido recibe un financiamiento público, que permite a los
“dueños” del mismo, manejarse libremente, es decir, administrarlo de la forma
en que más le convenga. Es decir, de manera “discrecional”.
Los
partidos políticos a diferencia de los entes gubernamentales, no tienen su
presupuesto etiquetado al 100%, es decir, los partidos únicamente esta
obligados a destinar el 2% para actividades específicas de mujeres y capacitación
y el resto de su financiamiento, pueden otorgarlo de manera libre, sin límite
alguno. Pueden hacer contrataciones sin acudir a la ley de Adquisiciones, o
contratar en la nómina del partido a sus familiares, sin incurrir en nepotismo;
y si bien, ya estaban obligados a transparentar sus finanzas, cierto también lo
es, que no existe sanción alguna contra el incumplimiento de esas obligaciones.
Esto significa que en el caso de las dependencias gubernamentales si estos
incumplen con las obligaciones legales de transparencia, los servidores
públicos enfrentan los procedimiento administrativos ante Contraloría Interna
por incumplir con dichas leyes, situación que no ocurre con los partidos
políticos, pues si estos incumplen, no pasa nada.
“¡Aquí se maneja un chingo de lana¡”, “nomas
que lleguen los candidatos, vas a ver los pesos, uno tras otro, no te imaginas
cómo es esto”. Hay que estar pendientes
para cuando suceda eso. Me decía
Francisco que hacer partidos políticos era un excelente negocio y que además, podía
uno recuperar la inversión, desde los primeros meses.
Tiempo
después, platicando con Benjamin Morgado, un exmilitante panista, me decía algo parecido, él me contaba
que ya había participado antes en la conformación de un partido político y que
le tocaba ser algo así como “operador logístico”, decía que su trabajo era
acudir a un Banco Inbursa y retirar dinero en efectivo, para entonces,
repartirlo a la gente, el día de las asambleas. Les podía dar de 100 o de 500,
dependiendo de la zona. Me platicó
inclusive, que el partido que estaba conformando, era de un familiar cercano a
Carlos Slim y que a la mera hora, habiendo cumplido el mínimo de personas
asistentes, no pudo obtener el registro por una puta pendejada, pregunte cual,
me respondió que no cumplió con la observación del IFE, de modificar los
Estatutos. Me dijo inclusive, que dentro del Jurídico de ese Partido, se
encontraba Matus, un abogado del Partido Humanista; Benjamin recordaba esa
anécdota, con algo de molestia e incredulidad, saber que se había perdido el
registro del partido en el escritorio, era algo inconcebible.
Quizás,
me hubiera gustado escribir la historia, desde el principio, desde que se
hicieron las asambleas. Describir, todas las proezas que hacen los ciudadanos
con principios para conformar nuevos partidos políticos; inclusive, decir
también, lo que hacen, las personas que hacen de esto, su modus vivendu.
Resulta
pues, que Celis me platicó su historia, me dijó que participó en el proceso de
la constitución del Partido Humanista por la invitación y recomendación que le
hiciera Raymundo, con don Ignacio Irys Salomón. Este ultimo, a quien se le
atribuye haber hecho, cinco partidos políticos y todos ellos, con perdida del registro.
Fue
así, como Javier López Celis, abandonó el PRD para irse al Partido Humanista.
Don
Nacho Irys - me explicaba el Profe Celis - buscaba operadores para conformar
asambleas en toda la República Mexicana. Me pidieron que le hiciera unas y yo,
se las hice. Para hacer una asamblea, necesitas tener recurso, porque necesitas
contratar salón, sillas, mesas, sonido, computadora con impresora para el fotocopiado de las credenciales de elector y ofrecerle a los asistentes, algún incentivo para que
acudan a ella. Es obvio que esta es una realidad. “Si no hay recurso, no hay
condiciones de operabilidad”. “pero para
mi, era una chamba, más”, “pero nunca pensé que pudiera enamorarme del
proyecto”. “Nadie pensó que la fractura del PRD, fuera en proporciones
inimaginables”. "Qu existieran personas, que realmente se sumaran al proyecto".
La
legislación electoral esta hecha, para que no se hagan partidos políticos.
Hacer un partido político, definitivamente, es una empresa política, donde el
interesado, tiene que “invertir” dinero y la manera de hacerlo, es,
“movilizando gente”. La gente ya no la convences con despensas, cada vez es más
difícil; lo triste de todas esas palabras, es saber, que no existe cultura política,
conciencia cívica, que las personas o la mayoría de ellas, no les interesa la
política. Es cierto, muchos venden su voto y hasta sus asistencia en una
asamblea. Hemos convertido la política,
en un vulgar tianguis.
Las
personas no les interesa la política y la concepción que tienen de los
políticos, es totalmente distorsionada. La gente piensa que el político, tiene
mucho dinero, que es mentiroso, que es cínico, que es ladrón, que es
influyente; pero la verdad, es que son puros estereotipos; los ciudadanos no
participan en la política, porque les preocupa más el futbol o las telenovelas,
cuando la política, es uno de los tantos derechos y actividades, en las que se
encuentra sumergidos los seres humanos y que sirve, precisamente para
solucionar problemas comunes.
Sin
embargo, lo cierto es, que mientras la inmensa mayoría de los ciudadanos no
participen en la política, esta actividad, seguirá siendo ejercida, por unas
cuantas personas, que conocen “su negocio”. personas que inclusive, no ven con buenos ojos, el ingreso de personas ajenas a dichos partidos políticos; "partidos cerrados", que inclusive, constituyen "negocios familiares" de sus principales lideres; cuestión que se dijo también ocurrió en el Partido Humanista, por una parte la familia de Javier López Macias y por la otra, la esposa e hijos de Ignacio Irys Salomón.
Al menos en el Estado de México, no participaron, ni las esposas, ni los familiares, de Javier López celis y Abimael Vilchis; salvo Raymundo, que tenía a su hijo, también de nombre Raymundo, participando en el Partido.
Al menos en el Estado de México, no participaron, ni las esposas, ni los familiares, de Javier López celis y Abimael Vilchis; salvo Raymundo, que tenía a su hijo, también de nombre Raymundo, participando en el Partido.
Por otra parte, muchos
de los que intervienen en política, lo hacen inclusive, con el afán de extorsionar
el partido, es decir, de “venderle” servicios, bienes o buscar simplemente chamba. Creen
que el papel del partido político, es dar dinero o empleo de “políticos” a sus
militantes y claro error. Eso no son, ni deberían ser los partidos políticos. Pero lamentablemente, eso le ocurrió al
Humanista, hubo personas que se acercaron a él, porque pensaban, que como era
partido político, “tenía mucho dinero”.
Inclusive, pareciera "chiste" lo que voy a decir; pero existe una industria del acarreo y del manifestodromo; organizaciones que pueden juntar cien, quinientas o miles de personas, en cualquier mitin, marcha, manifestación, al servicio presencial, del candidato o partido que los contratara. Fue el caso, por citar alguno de ellos, del "Movimiento Antorcha Campesina", que se encontraba interesada en "apoyar" al Partido Humanista. El Profe Javier López Celis no acepto ese apoyo; de haberlo aceptado, se hubiera corrido el riesgo de que el "movimiento antorchero", se "comiera" al Partido.
Inclusive, pareciera "chiste" lo que voy a decir; pero existe una industria del acarreo y del manifestodromo; organizaciones que pueden juntar cien, quinientas o miles de personas, en cualquier mitin, marcha, manifestación, al servicio presencial, del candidato o partido que los contratara. Fue el caso, por citar alguno de ellos, del "Movimiento Antorcha Campesina", que se encontraba interesada en "apoyar" al Partido Humanista. El Profe Javier López Celis no acepto ese apoyo; de haberlo aceptado, se hubiera corrido el riesgo de que el "movimiento antorchero", se "comiera" al Partido.
Igualmente, pensando también en la oportunidad de hacer negocios, fue como se acercó conmigo, Enrique Barrón, un antiguo exjefe del Gobierno del
Distrito Federal, dedicado a la industría de la edición y la publicidad. Me
ofrecía paquetes económicos, para que el Partido Humanista, pudiera no
solamente imprimir su propaganda en lonas, calcomanías, carteles, playeras, sino que
también, pudiera contratar espectaculares, en las principales vialidades del
país.
La renta de un espectacular, oscilaba de 50 a 300 mil pesos mensuales, según su ubicación. era increíble, como un partido político, aparentemente "chico", como MORENA, lograba contratar espectaculares a esos precios; el Partido Humanista, no tenía esos recursos.
La renta de un espectacular, oscilaba de 50 a 300 mil pesos mensuales, según su ubicación. era increíble, como un partido político, aparentemente "chico", como MORENA, lograba contratar espectaculares a esos precios; el Partido Humanista, no tenía esos recursos.
Pero
como explicarles, que yo no manejaba el dinero, del Partido. Inclusive, mis
principales ingresos provenían de mis ahorros, no de lo que la política me
pagaba. Esta situación personal, a la larga, me costó mi separación
matrimonial.
En
el Humanista trabaje con gente joven, con gente nueva, que no la había
conocido, ni tratado en el PRD. – me
decía el Profe Celis con demasiado orgullo.- Entre al Partido, gracias a
Raymundo, tebngo que reconcoerlo. Fue él, de los precursores de la constitución del Partido en el
Estado de México. Logramos construirlo, Abimael, Raymundo, Conrrado y hasta
Diana Montiel que nos apoyo esta última, con una asamblea.
El
proceso de las asambleas constitutivas del Partido Humanista en el municipio de
Nezahualcoyotl, fue gracias a dos liderazgos, uno era Diego, el otro Karina. Diego, había operado en Neza, con buenos
resultados, inclusive, le había ayudado al Partido Encuentro Social a constituirse
en dicho municipio; mientras que Karina, buena operadora, hizo también lo propio, siempre
acompañada, de su inseparable amiga Luz Naranjo.
Un día,
no pude contactar a Karina – me platicó Celis - y necesitaba una información
urgentemente y fue, cuando le llame a Luz Naranjo, era de noche, como eso de la una de la mañana y la tuve trabajando, a esas horas; a partir de ese momento, me cayó bien Luz
Naranjo y se me hizo fácil invitarla, tiempo después, como la Comisionada
Estatal de Elecciones.
Fue
así, como esta personaje, ingreso al Partido. Luz Naranjo me dijo que ayudo a
conformar una asamblea, que había participado en política, en el PRI y que
inclusive, había sido candidata a diputada federal por el extinto partido
Alternativa Social Campesina.
En Tepozotlan,
fue Ricardo Acho, un empresario restaurantero de dicho municipio, quien ayudo
también a conformar al Partido; en ese proceso, intervinó también Alma, cuyo
papel fue, hacer las tortas, para que las personas que acudieran a la asamblea,
por lo menos comieran.
Nunca
olvido que la gente que participa en la política, cuando llegan al poder, no
forman parte del gobierno y eso se me hace injusto . – me decía Celis – Se olvidan
de ellos y al gobierno llegan personas, que jámas participaron en la campaña.
Declaración que se me hizo ilusa, el gobierno, o ningún gobierno, debería ser botín
de los políticos; la administración pública, concretamente, debe estar en manos
de los técnicos, no de los políticos. Pero
eso, me lo quede callado. ¡hay cada bruto¡.
Sin embargo por momentos,
cruzó en mi la idea, que si el Partido Humanista lograba obtener diputaciones
locales, federales y ayuntamientos; yo podría entrar a trabajar en esos
lugares, donde habría mayor estabilidad y desde luego, mejores ingresos. Fue en
ese momento, donde nació en mí el interés de lo que significaba trabajar en la política.
Laborar como asesor, en la Cámara de Diputados, en el Congreso local, en alguna
presidencia municipal, ¡Ufff¡. Podía ayudar a muchos de mis compañeros, de mis
exalumnos, inclusive a mi familia. Bien valía la pena, que diariamente me
empobreciera. Darme mis vueltas a Toluca, aunque viera, dos o tres veces más en el autobus, la misma pelicula:
¡Frozen¡.
¡Frozen¡.
Quizás,
fue en ese momento que empecé a tener una empatía con el Profe, a quien lo veía
trabajar intensamente para ganar
elecciones y en ella, “colocar” a su gente. Recorría un municipio y luego otro,
conformaba juntas y mas juntas, y desayunaba, comía y cenaba con aspirantes a
candidatos y después con otro y luego
otro; dormía en donde le agarrara la noche. Parte de su vida, se la pasaba en
el automóvil, acompañado de Minerva, después Josefina. El Profe Celis creía en el proyecto, inclusive,
Francisco Nava también creía en el proyecto. Volteaba y los veía a todos, y
también, todos creían en el proyecto.
¡Menos
yo¡. Dentro de mi pensaba, tengo que confesarlo: "¡Pendejos, van a perder el registro¡".
Hay
que hacer una consultoría política, para dedicarnos a la búsqueda y
capacitación de candidatos; la vamos a necesitar, van a llegar varias personas
con los recursos económicos suficientes, pero con la nula experiencia en
participar. – Eso me aconsejaba Francisco Nava, en lo que yo sólo escuchaba.
Había que hacer un "FODA". Fortalezas, Oportunidades, Amenazas y Debilidades del Partido Humanista. elaborar un programa metodológico, con indicadores y objetivos concretos a corto, mediano y largo plazo. Un trabajo por demás cientifico, donde pudiera medirse y obtenerse los resultados deseados; pero al parecer, nada de eso existía. El Profesor Celis, recorría todos los rincones del Estado, sin la debida metodología, mas que con su voluntad, de "echarle muchas ganas".
La política electoral es una ciencia, no una buena voluntad de "echarle muchas ganas".
Había que hacer un "FODA". Fortalezas, Oportunidades, Amenazas y Debilidades del Partido Humanista. elaborar un programa metodológico, con indicadores y objetivos concretos a corto, mediano y largo plazo. Un trabajo por demás cientifico, donde pudiera medirse y obtenerse los resultados deseados; pero al parecer, nada de eso existía. El Profesor Celis, recorría todos los rincones del Estado, sin la debida metodología, mas que con su voluntad, de "echarle muchas ganas".
La política electoral es una ciencia, no una buena voluntad de "echarle muchas ganas".
Mi
tesis profesional, será, porque un partido, pierde o puede obtener el registro
y por eso, lo quiero enfocar, con el caso del Partido Humanista. Eso también me
decía Francisco Nava, obviamente que cuando me lo decía, dentro de mí, me reía, pues
yo estaba haciendo precisamente esa investigación. (la que actualmente escribo).
No
podía abandonar el Partido, ni aceptar las propuestas, de regresar a la Contraloria
General del Distrito Federal. ¡No lo hare¡, Prefería quedarme una y mil veces
en el Partido Humanista y esperar hasta el final; saber lo que ocurriría el día
7 de junio del 2015. Viviría los próximos meses una campaña electoral y
describiría, todas las experiencias que llegara a vivir. En verdad, que pese a mi escepticismo, quería que el partido, lograra obtener el mínimo del 3% de los votos.
Fue así como se
llevó a cabo, nuestra primera reunión de capacitación electoral con toda el
personal del Partido Humanista del Estado de México. Fue ahí, donde conocí a Marisol, lider del Partido en Tecamac; Gilberto, el Secretario de Relaciones Laborales del Partido y donde también,
tuve la oportunidad de conocer a José Luis, el Secretario de Elecciones del
Partido. Conocí a otras personas, que no
recuerdo el nombre; lo que si me consta, es que acudieron a la convocatoria,
Ericka la Secretaria de Asuntos Jurídicos y Luz Naranjo, nuestra Comisionada de Elecciones. (¡Luz, Luz,Luz¡)
José
Luis estaba molestísimo. Como Secretario de Elecciones, se acercó con Francisco
Nava y conmigo, para manifestar su inconformidad por las graves omisiones en que estaba incurriendo Isidro Coxtinica. No tenía mapas para operar,
lo que era un absurdo, pues Coxtinica lo que tenía en su oficina, eran kilos y
kilos de mapas y engargolados con las secciones electorales y José Luis,
nuestro Secretario de Elecciones, no podía operar. Algo estaba mal. Porque un Secretario
de Elecciones no podía operar en su trabajo técnico y si en cambio, el
Representante del Partido en el IEEM, tenía toda la información y
documentación, sin que este la compartiera.
Ese era
el momento de destituirlo. Coxtinica no había ingresado los representantes en
los Consejos Distritales y Municipales y Luz Naranjo, recibió un cumulo de
quejas, por esa omisión; de que servía que Celis recorríera el Estado, constituyera "Juntas Municipales de Gobierno" y tuviera
cuanto desayuno y comida con los lideres regionales, si su flamante Representante
de Partido, no ingresaba el oficio para la acreditación de los representantes, todo por la sencilla razón, de que “tenía mucho trabajo”. ¿Para que carajos teníamos representante en el IEEM?
O sea,
la excusa más imbécil e incompetente que he escuchado en toda mi vida laboral.
No era posible que Isidro continuara un día mas en la representación, pero lo
que se me hacía difícil creer, era que el propio Celis, acudía a defender a su
inepto representante, “desactivando” todo tipo de grilla. Diciéndonos a Francisco
y a mi, que el motivo de la reunión era una capacitación electoral, no un quejodromo y que mejor, “nos calmaramos”, "no hicieramos olas".
A partir
de ese momento, dije, “esto valió madres”, José Luis, tuvo que “disciplinarse”
y no manifestar su inconformidad contra Coxtinica como lo hubiera gustado hacer. Al igual que
Luz Naranjo se quedo callada y su amiga, Josefina Quintana, nuestra Comisionada
de Vinculación, también se quedo callada.
Javier López Celis mandaba en el Partido y todos, absolutamente todos, obedecían. ¡Inclusive Yo¡.
Javier López Celis mandaba en el Partido y todos, absolutamente todos, obedecían. ¡Inclusive Yo¡.
Francisco
Nava dio una excelente exposición, pues tomo un pizarrón y simulo una cancha de
fútbol, haciéndonos saber que en el proceso electoral, que posición teníamos
que jugar; preguntándonos, si nos sentíamos en la "defensa", en la "media", en la "delantera", en la "banca"; si eramos "jugadores" o el "Director Técnico".
Brillante
metáfora, pues automáticamente, los ahí presentes comenzaron a ubicarse en la posición
en la que se encontraba. “¡Todos eran directores técnicos¡”. Coxtinica,
ni siquiera era eso, el se creía el "dueño del equipo".
El
tema de los recursos nuevamente generó discusión, cuando Coxtinica habló de los
dineros. Ahí estaba la “pandilla” de Chicoloapan, encabezada por Cristian,
quien pidió recursos para poder montar su oficina y pagar las cuentas del
telefono. El profe de plano, tuvo que interrumpir a Coxtinica y decir, que no
había dinero. Que cada quien, montaría su oficina con los recursos que tuvieran
y que tan pronto, se tuvieran recursos, estos de distribuirían en la medida de
las posibilidades del Partido. reiterando una y otra vez más, que el Partido, no tendría el dinero que se esperaba.
A esa exposiicón, acudió también nuestra Secretaria Nacional de Elecciones Diana Montiel, quien sólo tomaba nota y observaba. En el receso, después de comer ricos tacos de guisado placeros, todo esto, en el auditorio del IEEM, Francisco y yo le preguntamos a Diana, que le parecía la capacitación, nosotros esperando que nos dijera algo bueno, sin embargo su respuesta fue seca y tajante: ¡Mal¡.. Nunca nos dijo Diana Montiel, porque estaba mal la capacitación. Su respuesta la considere, si bien "respetuosa", demasiado ofensiva y sin fundamento.
A esa exposiicón, acudió también nuestra Secretaria Nacional de Elecciones Diana Montiel, quien sólo tomaba nota y observaba. En el receso, después de comer ricos tacos de guisado placeros, todo esto, en el auditorio del IEEM, Francisco y yo le preguntamos a Diana, que le parecía la capacitación, nosotros esperando que nos dijera algo bueno, sin embargo su respuesta fue seca y tajante: ¡Mal¡.. Nunca nos dijo Diana Montiel, porque estaba mal la capacitación. Su respuesta la considere, si bien "respetuosa", demasiado ofensiva y sin fundamento.
Después
el profe Celis se acerco a donde estaba Francisco Nava sentado y le hizo un atractivo ofrecimiento.
Le dijo, que preparara su documentación, sobre todo el cambio de residencia del
Distrito Federal al Estado de México y su constancia de residencia, porque él, sería uno de los candidatos a diputado
plurinominal.
Francisco
Nava me comentó que ese ofrecimiento se hizo, para que dejara de molestar a
Coxtinica; en pocas palabras, era una manera de "llegarle al precio". Yo le dije
a Francisco que aceptara el ofrecimiento, que ya después, se acomodarían las
fichas. No siempre se tenía ese tipo de ofrecimientos, de ser diputado. no siempre se tiene tampoco la oportunidad, de trabajar cercanamente de alguien, que puede llegar a ser diputado.
Aquella
vez, al retirarnos del IEEM, Francisco y yo molestos por la forma en que se
solapó y se protegió el error de Isidro Coxtinica, éste nos abordó en la
salida, de una manera ratadora y amigable, con un tono burlón y mandón, nos
preguntó, que cuando nos íbamos a presentar, que no se nos olvidara que teníamos
que cubrir guardia, que ya momento de que se nos acabara el descanso; en pocas
palabras, nos dio entender que ya nos pusiéramos a trabajar. ¡O sea¡. Francisco y yo, eramos los pendejos y los huevones.
Obvio
que nos dio coraje. Isidro Coxtinica podía cometer mil pendejadas y Celis,
jamás lo removería. ¡Calmate Francisco¡.
¡Hazte la idea, de que ese cabrón, no se va remover¡. – ¡Pero
ese pendejo, nos va llevar al baile¡ ¡Nimodo¡. ¡La culpa será de Celis¡.
¡El Partido, va valer madres¡
¡El Partido, va valer madres¡